Todos en casa tenemos normas. A veces no somos conscientes de ellas porque ya forman parte de nuestra manera de vivir. Un niño de 2 años sabe, intuitivamente, que los papeles del despacho de su padre no se tocan. ¿Por qué? Porque en otras ocasiones que ha intentado coger esos papeles su padre se ha disgustado con él, por lo que concluye lógicamente que esos papeles no se deben tocar. Ya está hecha la norma.
Pero en otras ocasiones es conveniente dedicar un tiempo a pensar cuales queremos que sean lasnormas de nuestra casa así como los objetivos que perseguimos como familia. Los padresdeberíamos dedicar un tiempo a hacer un proyecto de futuro involucrando a todos los miembros de la familia, estableciendo normas, objetivos y consecuencias. Se trata, sencillamente, de tener una dirección a donde dirigirnos.
¿Por qué son necesarias las normas?
Estas normas o reglas son necesarias porque, además de socializar, favorecer la armonía familiar y poner límites al comportamiento de nuestros hijos, les permite prever y controlar y, por lo tanto, sentirse seguros. Son su referente para saber qué se espera de ellos en cada circunstancia y cómo deben actuar.
No se crean solo para que nuestros hijos obedezcan. Nuestro objetivo al implantarlas en casa debe ser más ambicioso: las reglas les ayudarán a esforzarse para conseguir lo que se espera de ellos y sabrán que su esfuerzo es valorado y apreciado por las personas que más le importan.
¿Qué es importante para que las reglas sean eficaces?
- Deben ser claras y concisas. En esta casa no se pega nunca
- Estar adaptadas al nivel madurativo de los hijos.
- Conocidas y aceptadas por todos los miembros de la familia. Mejor si están visibles en algún lugar de fácil acceso.
- Han de ser sistemáticas. Su aplicación no ha de depender del humor que tengas ese día. Si haces alguna excepción, déjalo muy claro: Hoy es una excepción por ser tu cumpleaños, por eso puedes acostarte al acabar la película.
- Deben perdurar durante un largo período de tiempo, hasta que puedan ser automatizadas por todos. Si has de cambiarlas porque las circunstancias así lo exigen, házselo saber a tushijos: Ahora tienes más deberes que el año pasado. Puedes acostarte a las 22,00h en lugar de las 21,00h pero nunca más tarde.
Existen unas normas, las de la familia, las establecidas por los padres o por todos los miembros de la familia, para una mejor convivencia. Y las normas que “entienden” los niños, las que crean según sus apetencias y comodidad, sin tener en cuenta sus verdaderas necesidades y las de su familia. Si nosotros no ponemos las normas, respetuosas y adaptadas a sus necesidades, las pondrán ellos, niños de 4, 6 o 10 años, guiados exclusivamente por lo que les apetece y no por lo que les conviene.
Aquí tienes algunos ejemplos, por edades, de normas que “interpretan” nuestros hijos si no somos coherentes o si no las establecemos con claridad. O sencillamente, si no existen.
Normas para niños de 7 a 9 años
Normas de la familia
- Me levanto a la primera y me visto rápido. A la hora de salir, mis padres me llevarán al colegio tal y cómo esté.
- Hago yo solo los deberes y si tengo algún problema, mis padres me ayudarán.
- Entre semana no se ve la tele.
- He de cumplir mis obligaciones familiares sin que me lo recuerden mis padres
Elena Roger Gamir
Pedagoga- Solohijos
Pedagoga- Solohijos
Normas que “entienden” los niños
- Si por la mañana no me visto, mis padres me esperarán (a pesar de reñirme).
- Si me distraigo con los deberes, mis padres me ayudarán todo lo necesario para que yo los lleve al día siguiente bien hechos.
- Entre semana no me dejan ver la tele pero si insisto mucho puedo conseguir ver los dibujos.
- Si mis padres no me persiguen para que haga mis obligaciones familiares, no es necesario hacerlas.

No hay comentarios:
Publicar un comentario