miércoles, 3 de diciembre de 2014

Disertaciones "Los Planetas"

Para Ciencias Naturales se realizó una disertación grupal de los planetas del Sistema Solar.

Aquí la evidencia de lo descrito

Mercurio

Venus

Tierra

Júpiter


Saturno


Urano


Neptuno


lunes, 6 de octubre de 2014

Un excelente método para multiplicar números grandes!

Hola, les dejo un excelente método para multiplicar números grandes como desafío, veamos quién se lo aprende!, debes ir paso por paso tal como ilustra esta publicación :-) 
Siempre es bueno aprender cosas nuevas y entretenidas
Fuente: http://mati.naukas.com/2012/10/24/multiplicando-multiplicando

—¿Te queda mucho, Sal?
—Sólo una multiplicación, Ven.
—¿Te puedo ayudar?
—No, gracias. Éstas no sabes hacerlas aún.
—Enséñame tú.
—Eres muy pequeño, Ven —respondió el gafotas —Ya te las enseñarán en el cole.
—Andaaaaaaa —insistía el pequeño —Enséñameee, Saaaaal…
—¿Qué es lo que quiere aprender este caballero? —preguntó Mati que acababa de llegar.
—¡Hola, Mati! —saludó Ven con alegría pensando que ella sí que le enseñaría.
—Hola, Mati —saludó Sal sin levantar la cabeza de su cuaderno —Ven quiere hacer multiplicaciones de varias cifras y aún no se lo han enseñado en el cole.
—Bueno, bueno… —comenzó a decir la pelirroja —Igual yo le puedo enseñar un pequeño truco para hacerlo…
—¿Con la calculadora? —preguntó Ven mirando de reojo.
—No, no, sin calculadora —dijo ésta —Con la mente, lápiz y papel. A ver, ¿qué multiplicación es la que queremos hacer?
—235 por 1591 —dijo Sal.
—Veréis —les dijo —Vamos a escribirlo en una tabla como en el juego de los barquitos. Ponemos arriba, en horizontal, por ejemplo, el 1591, lo escribimos de izquierda a derecha. Y en vertical, de abajo a arriba, el otro, el 235.
—Ahora vamos a dividir los cuadraditos de la tabla —les dijo —pintando estas líneas diagonales con el lápiz…
—Pues como en los barquitos —continuó Mati —Vamos rellenando los cuadraditos con el resultado de multiplicar los 2 cuadraditos correspondientes: 5 por 1 es 5, ponemos 05, para rellenar las dos mitades del cuadradito… 5 por 5 es 25, ponemos el 2 en la parte de abajo y el 5 arriba… 5 por 9 es 45, el 4 en la parte de abajo y el 5 arriba… y otra vez, 5 por 1 es 5…
—¿Puedo hacer yo el 3, Mati? Me sé la tabla del 3 —pidió el pequeño.
—Por favor… —dijo Mati y le dio el bolígrafo en una graciosa reverencia.
—A ver… 3 por 1 es 3, pongo 03, el 0 abajo… —decía Ven —3 por 5 es 15, el 1 abajo y el 5 arriba… 3 por 9 es 27, 2 abajo y 7 arriba…y 3 por 1 es 03…
—¡Me toca! —dijo Sal y su hermano le dio el boli —2 por 1 es 02… 2 por 5 es 10, el 1 abajo y el 0 arriba… 2 por 9 es 18, un 1 abajo y un 8 arriba… y otra vez 02…
—¡Muy bien! —les dijo la gafotas —Ahora vamos a numerar las diagonales que hicimos a lápiz, empezando desde arriba, desde la más a la derecha:
—¿Y ahora qué? —preguntó el pequeño ansioso.
—Ahora vamos a sumar todos los números de color rosa que están por encima de cada diagonal, siguiendo el orden que indican los números —les dijo —Encima de la diagonal 1, tenemos solo 5, lo ponemos…
—Ahora sobre la línea 2… —empezó a decir Mati.
—¡8! —gritó Ven —5 más 0 y más 3 es ¡8!
—Eso es —confirmó Mati.
—¡Yo hago la 3! —pidió Sal — 5 más 4, es 9; más 7 es 16; más 0, nada, más 2..18 ¿lo pongo, Mati?
—No, ahora —le respondió —cuando nos sale un número de 2 cifras, ponemos sólo las de las unidades, 8 en este caso, y le regalamos las decenas a la siguiente diagonal, ¿vale?
—¡Me pido la línea 4! —exclamó Ven —¿Sumo también el 1 que le ha regalado la línea 3?
—Claro —dijo Mati —por eso lo hemos escrito en rosa.
—¡Vale! —Ven frunció el ceñó estuvo un rato mascullando y finalmente — ¡23! ¿Le regalo el 2 a la siguiente?
—Eso es —Mati sonrió satisfecha.
—Venga, ¿hacemos la 5? —les preguntó.
—La hago yo —dijo Sal —¡7!
—¡Yo termino! —pidió Ven — ¡Las dos que faltan!
—¡Qué morro! —se quejó el gafotas.
—Pero si la última es 0…
—¡Ea! —les dijo la pelirroja —Ya lo tenéis, leemos los números azules de izquierda a derecha y tenemos que 235 por 1591 es 373885.
—¡Toma, toma, toma! —gritó el pequeño — ¡Y decía Sal que era muy complicado para mí! ¡Cómo mola!
—Bueno, es cierto —aceptó el gafotas y añadió con burla —que con este método lo puede hacer un pequeñajo como tú…
Ven arrugó su carita y Sal añadió con una sonrisa
—Un pequeñajo tan listo como tú, quería decir…
Ven abrazó a su hermano sonriendo y Gauss…bueno, ya sabéis que a Gauss no le gusta demasiado quedarse al margen de estos eventos de amor desenfrenado…

Recordando la Multiplicación

Estas diapositivas son las que trabajamos en clases, espero les sirvan para estudiar 









Maqueta a escala de Objeto tecnológico




¿Te acuerdas cuando hicimos las carpetas sobre un objeto tecnológico? bueno ahora haremos ese objeto en una maqueta que tú construirás y harás realidad. 


Objetivo: Elaborar maqueta de objeto tecnológico a escala



La actividad consta de dos etapas: 

Etapa 1: Construcción del objeto tecnológico
Etapa 2: Presentación al curso de su objeto tecnológico

Cada una de estas etapas consta con nota que será consignada en el libro en Tecnología. 

ETAPA 1: Lunes 13 de Octubre

La etapa 1 consta de la construcción del objeto tecnológico en clases, parte de la nota considera la participación y trabajo en clases, es por ello que es obligatoria la asistencia ese día, sólo se excusan quienes tengan licencia médica. 

Materiales  etapa 1


* Según el objeto tecnológico que vas a construir debes traer materiales para hacerlo: por ejemplo cajas de remedios, cartulinas, plumones, entre otros. Es muy importante que cada niño traiga sus materiales personales, para que puedan trabajar tranquilos y evitar perder tiempo consiguiéndose cosas con sus compañeros. 

(esta actividad al ser todos los objetos diferentes, los materiales que elijas son libres, los únicos materiales que no están permitidos son silicona líquida, cartonero, u otro material considerado peligroso de manipular)

En caso de no terminar la actividad en clases, los niños se llevan su objeto y lo traen terminado el día 20 de octubre. 




ETAPA 2: Lunes 20 de octubre

En esta etapa los niños presentarán una breve descripción de su objeto tecnológico a sus compañeros, no necesitan papelógrafo ni presentación de power point para presentarlo, solo el objeto para mostrárselo a sus compañeros y contarles sobre sus características principales, Ej: ¿Para que sirve, cómo soluciona la vida del ser humano, cuándo fue el primero que crearon, qué características importantes tiene...? entre otros.





Creando textos informativos: Ficha del Texto

A continuación se detalla el formato y contenido que debe tener la Ficha informativa de cada uno de los textos que hemos leído






Las fichas informativas se realizan en el horario de clases, y los materiales necesarios para hacerlas se las entregamos en el aula, solo deben leer el libro y listo! 

22/09 --> La Cabaña en el Árbol (Gillian Cross)
06/10 --> Las descabelladas aventuras de Julito Cabello (Esteban Cabezas)
20/10 --> Érase una vez un hermoso planeta llamado tierra... (Saúl Schkolnik)
03/11 --> ¿Seguiremos siendo amigos? (Paula Danzinger)
17/11 ---> Ambar quiere buenas notas (Paula Danzinger)

jueves, 2 de octubre de 2014

Técnicas y estrategias para trabajar con niños hiperactivos



¿Cómo le convenzo para que se siente a hacer los deberes? ¿Qué le digo para que no se levante mientras come? ¿Hay alguna manera de ayudarle a mejorar sus trabajos? ¿Qué hago para que me escuche?… ” Si tienes un hijo con hiperactividad seguro que éstas y muchas otras preguntas han pasado mil veces por tu cabeza. Las respuestas te las dan una serie de estrategias que te explicamos a continuación.
Los síntomas que caracterizan el “Transtorno de Déficit de Atención con Hiperactividad” (TDAH) son la impulsividad, la hiperactividad y la baja atención. Pero, sin duda, lo que ayuda a detectarlo es observar si un niño manifiesta con frecuencia las siguientes conductas:
  • Su comportamiento es infantil para su edad, excesivamente inquieto y dependiente; más propio de un niño de menor edad.
  • Le cuesta concentrarse, no mantiene la atención cuando es necesario.
  • Es desorganizado y suele hacer los trabajos con una baja calidad.
  • Frecuentemente deja los trabajos sin terminar o interrumpe los juegos.
  • Está continuamente levantándose cuando debería estar sentado, por ejemplo, en la clase o a la hora de comer.
  • Es muy impulsivo, hace las cosas sin meditarlas previamente.
  • Mueve mucho las manos y los pies.
  • Suele interrumpir a los demás cuando están hablando o realizando alguna actividad.
  • Siempre está corriendo y saltando, como si tuviera un motor en marcha.
  • Le cuesta relacionarse con otros niños debido a que siempre está cambiando de juego, no respeta los turnos y no sigue las reglas del grupo.
  • A menudo pierde cosas o las olvida.
  • Es desobediente y su comportamiento provoca las quejas de sus profesores.
Si tu hijo cumple algunos de los puntos expuestos aquí, quizás sea recomendable acudir a un profesional para diagnosticar o descartar el trastorno de hiperactividad.
Técnicas y estrategias para ayudar al niño hiperactivo
La forma de tratar el “Trastorno de Déficit de Atención con Hiperactividad” es modificar o compensar lo más posible aquellas conductas típicas que repercuten negativamente en la vida diaria del niño y de su familia. El objetivo principal es reducir su impulsividad e inquietud motriz y aumentar su atención, que son la fuente de sus principales problemas. Las corrientes psicopedagógicas conductista y cognitivista ofrecen diversas estrategias para tratar la hiperactividad. La corriente conductista centra su atención en cómo el ambiente en el que se mueve el niño (la familia, los profesores, etc.) interactúa con él para, manejando esta interacción, modificar las formas de comportamiento. La corriente cognitivista actúa directamente sobre el niño enseñándole a ejercer su propio control a través del entrenamiento en estrategias.
Corriente conductista: cambiar una conducta inadecuada a través del ambiente
Para modificar determinadas actitudes, como la agresividad o la desobediencia, se emplean técnicas de cambio conductual que se apoyan en la psicología conductista. La base de todas ellas es la idea de que todo comportamiento es una forma aprendida de responder a determinadas circunstancias. Cuando lo que obtenemos al responder de determinada manera es bueno, agradable o sirve a nuestros propósitos, esa respuesta se instaura en nosotros, es decir, la aprendemos y siempre que nos vemos en circunstancias similares respondemos igual. Por el contrario, si con nuestra actuación no logramos lo esperado, desechamos la respuesta como “no válida” y dejamos de emplearla.
Esto supone que tu actitud es fundamental a la hora de manejar la de tu hijo, ya que es la que le proporciona la información de si sus respuestas son adecuadas y sirven a sus propósitos o, por el contrario, debe sustituirlas por otras. Los padres pueden, sin darse cuenta, fomentar las respuestas inapropiadas. Un ejemplo muy claro es cuando se cede a un capricho, que se ha negado en un principio, para contener una rabieta. La conclusión del niño en esta ocasión es clara (y muy lógica): “enfadándome, gritando y tirando las cosas consigo lo que yo quiero”. Resultado: cada vez recurrirá con más frecuencia a las pataletas.
Las técnicas de cambio de conducta lo que hacen es controlar las consecuencias de las acciones convirtiéndolas en agradables, a través del “refuerzo positivo”, o desagradables mediante el “castigo”. Aquellas conductas del niño a las que siga un “refuerzo positivo” serán aprendidas como útiles y se repetirán; aquellas otras a las que acompañe una consecuencia negativa terminarán desapareciendo. Los refuerzos pueden ser muy variados. Al principio, cuando una actitud está muy instaurada, se recurre a recompensas de tipo material (un juguete, una chuchería, etc.).
Posteriormente se van restringiendo este tipo de refuerzos para que el niño no haga las cosas por elpremio sino porque realmente ha adquirido nuevas actitudes con las que se siente más satisfecho. Para ello, desde el principio (junto con las recompensas materiales) y a lo largo del tiempo (cuando ya se han eliminado aquellas) el niño debe recibir refuerzos sociales como abrazos, alabanzas o cualquier otra manifestación de afecto por lo bien que ha actuado. Por otra parte las consecuencias negativas, siempre relacionadas con las conductas que deseamos eliminar, serán cosas como quedarse sin ver la tele o recoger el cuarto, pero jamás castigos físicos. Además, todo castigo debe ir acompañado del refuerzo de la conducta alternativa.

¿Cómo puedes aplicar todo esto? 
Una forma es hacer un trato con tu hijo. Piensa en alguna cosa que quieras cambiar de él, por ejemplo, que no se levante de la mesa mientras come. Ya tienes establecido el objetivo general. Ahora, en función de la problemática, piensa cuándo y cómo vas a reforzar el cambio de comportamiento: si tu hijo no aguanta más de tres minutos seguidos en la mesa, empieza por reforzar que consiga estar sentado al menos cinco minutos. Según le vaya resultando más sencillo cumplir el objetivo ve aumentando el tiempo hasta que, finalmente, reciba el premio sólo si permanece toda la comida sin levantarse.

El siguiente paso es acordar el premio o refuerzo. En este caso lo más apropiado es un sistema de puntos o fichas canjeables. Elabora con tu hijo una lista de cosas que le gustaría hacer o conseguir y pon a cada cosa un valor en función de sus características: un caramelo 2 puntos, media hora más con el ordenador 8 puntos, ir al cine 14 puntos, comprar un juguete determinado 20 puntos, etc. Ya sólo queda ponerlo en práctica: cada vez que tu hijo cumpla el objetivo marcado refuérzale con un punto y cuando desee canjearlos dale la recompensa que le corresponda según acordasteis.

Corriente cognitivista: enseñar a hacer las cosas mejor
Según la corriente cognitivista, la forma más adecuada de ayudar a un niño hiperactivo a resolver sus problemas correctamente es entrenarle en los pasos que debe seguir, es decir, darle estrategias para que sepa cómo actuar.
Por ejemplo, mantener la atención es una habilidad casi automática en la mayoría de las personas, pero para un niño hiperactivo es todo un triunfo. Para facilitarle esta tarea debemos enseñarle cómo se presta atención facilitándole una serie de instrucciones que resuman eso que hacemos las personas cuando prestamos atención (centrarnos en lo importante, ignorar los estímulos irrelevantes, etc.). En este caso estaríamos hablando de estrategias atencionales. Dicho así parece muy abstracto, sin embargo lo puedes aplicar de forma particular a cada una de las tareas con las que tu hijo tenga dificultades. Una manera de hacerlo efectivo es el “modelo de autoinstrucciones” que debéis practicar cada día tantos días como sea necesario hasta que tu hijo sea capaz de realizar el quinto paso de forma natural:
  1. Modelado: haz tú la tarea mientras vas diciendo en voz alta los pasos que sigues, mediante instrucciones claras y concisas.
  2. Guía externa manifiesta: ahora es él quien realiza la misma tarea mientras le ayudas repitiendo junto con él los pasos.
  3. Autoguía manifiesta: el niño repite solo las instrucciones, en voz alta, mientras hace la tarea.
  4. Autoguía manifiesta atenuada: en vez de hablar en voz alta debe cuchichear las instrucciones.
  5. Autoinstrucciones encubiertas: finalmente el niño realiza la tarea en silencio mientras se guía por las instrucciones a través del pensamiento.

Esther García Schmah
Pedagoga

Es importante reunirse con el Profesor Jefe o Tutor



¿Cuántas veces te has entrevistado con el tutor de tu hijo? ¿Crees que es suficiente? A veces no tenemos muy claro cómo y cuándo debemos dirigirnos al centro educativo donde estudian nuestros hijos, pero es importante que cada cierto tiempo nos reunamos con el docente responsable del niño para intercambiar información y definir objetivos.

En más de una ocasión he escuchado excusas como éstas de los padres de mis alumnos:
-“No hemos venido antes para no molestar. Como parecía que no había problemas, no queríamos hacerles perder tiempo. Ya sabemos que tienen mucho trabajo…”
Y, si he de ser franco, yo también he tenido la tentación de excusarme de la misma manera ante el tutor de mis hijos. Por alguna extraña razón, nos resulta difícil encontrar el momento oportuno para concertar la cita, tememos hacernos pesados. Lo cierto es que el contacto periódico con el centroeducativo es algo fundamental para que tu hijo aproveche al máximo las oportunidades educativas que se le ofrecen.
No me extenderé sobre la utilidad de estas visitas. Sólo apuntaré algunos hechos: la educación de nuestros hijos es un trabajo conjunto que realizamos junto con sus profesores, por tanto es absurdo llevarlo a cabo sin la comunicación y coordinación necesarias; conocer el centro y hablar con los profesores nos permite disponer de más datos para valorarlo; además, es un medio de formación a nuestro alcance y, por si fuera poco, cada vez que hablamos con el tutor se produce una especie de motivación mutua que hace que, tanto nosotros como nuestros hijos y el mismoprofesor, dediquemos más atención e interés a la tarea que nos ocupa. Así pues, si estamos de acuerdo sobre su utilidad, pasemos a considerar las condiciones que nos permitirán aprovechar al máximo las entrevistas con el tutor de nuestro hijo.
Periodicidad conveniente de nuestras entrevistas con el tutor
Es recomendable entrevistarse una vez por trimestre, preferiblemente unos días después de recibir las notas. A principio de curso, lo razonable sería acudir a mitad del trimestre.
No obstante, si algún acontecimiento nos hiciera sospechar que nuestro hijo o hija puede tener un problema, valdría la pena contactar por teléfono con el tutor y valorar con él si es conveniente vernos. De todas maneras, no abuses de este recurso. No hace falta entrevistarse con el tutor si puedes resolver el problema por teléfono. Tampoco hace falta que llames por teléfono si puedes resolver el problema con una nota, y no es necesario que escribas una nota si tu hijo puede resolver la cuestión por sí mismo.
Preparación de la entrevista
Vale la pena concertar la entrevista con tiempo para que el tutor tenga ocasión de prepararla convenientemente.
Además de los datos que ya tenemos, es útil, durante los días previos a la entrevista, observar en nuestro hijo detalles como el tiempo semanal que dedica a hacer sus deberes y a estudiar, lacalidad de los trabajos escritos que realiza en casa, las dificultades que encuentra, el cumplimiento de sus tareas domésticas, qué hace en su tiempo libre y su estado de ánimo.
El día anterior a la fecha fijada es prudente que los padres dediquéis algún tiempo a preparar la entrevista de manera conjunta y que toméis nota de los temas que queréis abordar, de las informaciones que queréis transmitir y de las preguntas que os interese hacer.
Os puede servir de ayuda consultar y repasar la relación de posibles temas que incluyo a continuación. Es una manera de evitar que queden en el olvido algunos temas interesantes.
¿Qué temas conviene tratar?
1. Es conveniente informar al tutor sobre:
  • El tiempo semanal que nuestro hijo dedica a estudiar o a tareas escolares.
  • La calidad del trabajo observado.
  • El grado de responsabilidad en su estudio y en los encargos domésticos.
  • Las aspiraciones profesionales si ya está en los últimos cursos de secundaria.
  • La calidad del trato con vosotros y con los hermanos.
  • Los amigos con los que se relaciona y el tipo de relación.
  • A qué dedica el tiempo libre.
  • Estímulos educativos o pautas usadas en casa como medio de motivación o de formación.
2. Pedir información, en el caso de que el tutor no nos la ofrezca, sobre:
  • La actitud y comportamiento en clase.
  • Las expectativas que tiene respecto a nuestro hijo.
  • La relación que mantiene con los profesores.
  • Las relaciones que mantiene con los compañeros.
  • El grado de cumplimiento de sus deberes.
  • Las faltas de asistencia a clase.
  • Cualquier duda sobre el funcionamiento del centro o de las actividades extraescolares.
3. Solicitar la opinión del tutor sobre:
  • Nuestras estrategias educativas y las dificultades que encontramos.
  • Cómo colaborar para mejorar alguno de los aspectos en que nuestro hijo presente dificultades.
4. Expresar nuestra opinión sobre aspectos que consideremos mejorables en la organización del centro o de actividades docentes.
¿Cómo actuar durante la entrevista?
  • Es fundamental asistir a la entrevista, tanto si es un encuentro rutinario como si es una petición del centro, con el convencimiento de que asistimos a una reunión con un colaborador. Sólo si la entrevista tiene lugar en un ambiente de confianza podrá dar los frutos deseados.
  • Para contribuir al buen ambiente, es interesante comenzar hablando de los temas más satisfactorios para ambos y abordar más tarde los asuntos más desagradables o peliagudos.
  • En cualquier caso hay que intentar que la entrevista discurra en un tono amable y respetuoso, aun cuando las informaciones que recibamos no sean tan halagüeñas como desearíamos.
  • Es aconsejable llevar escritos los temas que queremos tratar y no dar oportunidades al olvido.
  • Lo más importante es acabar la entrevista con algunos propósitos concretos y, si es posible, llevárselos anotados. Una vez en casa hemos de conseguir mantener vivos los propósitos y valorar su eficacia en la siguiente reunión.
  • Si tu hijo te explica que un profesor ha cometido un error, habla con el tutor poniendo en duda la información recibida. No emitas juicios de valor. Es muy probable que si muestras una actitud recriminatoria, el tutor reaccione a la defensiva, y lo que podría ser un intercambio de información se convierta en un acto de justificaciones y descalificaciones.
  •  Confía en tu hijo mientras demuestre que lo merece, y comunícate con el tutor por mediación del niño.
    No es lo mismo decir:
    -“Mi hijo me ha dicho que el profesor de Matemáticas le ha expulsado de clase porque estaba hablando con su compañero, pero es que… ¡toda la clase estaba hablando! Pienso que no es justo y que tendrías que hablar con ese profesor porque me parece que está cogiendo manía a mi hijo”.
    Que decir:
    -“Me gustaría que te informaras sobre un asunto que me ha explicado mi hijo. Seguramente sólo me ha contado una parte de la realidad, la parte que le interesa. Según dice, el profesor de Matemáticas le expulsó de clase de manera injusta, por hacer lo que todos hacían. Cuando sepas de qué va,¿ podrías valorar la situación y ayudar a mi hijo a aceptar mejor las consecuencias de sus actos, en caso de que haya tenido más culpa de la que dice?. De todas maneras, me gustaría que me llamaras por teléfono y me dieras tu versión de los hechos”.
Por mi experiencia como profesor, puedo afirmar que el simple hecho de que los padres mantengan una entrevista con el tutor suele ser un buen estímulo para los hijos. Ésta es una de las acciones educativas más fáciles y eficaces de todas las que están a nuestro alcance.


José María Lahoz García
Pedagogo (Orientador escolar y profesional),
Profesor de Educación Primaria y de Psicología
y Pedagogía en Secundaria